Edad Media
La música medieval es uno de los temas más apasionantes que la cultura nos brinda. A ello no es ajeno el hecho de que la forma de la música medieval es un misterio.
A diferencia de otras manifestaciones artísticas que perduran en el tiempo, la música desaparece en el momento de desarrollarse y la única forma de hacerla pervivir es mediante una notación musical que en la Edad Media o no se empleaba o se hacía de manera muy pobre en información, insuficiente en la mayoría de los casos para una reproducción fiel. Lo que si sabemos es que la música de los cristianos del Imperio Romano de la que va a ser heredera la medieval, se basó en repertorios ya existente.
En los primeros tiempos, la música medieval recibe dos influencias palpables:
- Influencia hebrea. Se recoge el modo hebreo de cantar a base de largos melismas y la importancia del canto en el culto.
- Influencia grecorromana. Del mundo clásico se hereda la teoría musical con su sistema modal y la valoración ética y educativa de la música expresada por Platón.
Canto Gregoriano
El Papa Gregorio I el Magno recopila y organiza una serie de cantos romanos que establece como los obligatorios de la liturgia unificada cristiana. La música eclesiástica de los primeros siglos medievales está al servicio del texto litúrgico de los oficios religiosos.
Pero el caso es que no existía una sola liturgia unificada. De hecho, con la expansión del Cristianismo a partir del siglo IV, se desarrollan diferentes liturgias regionales independientes de Roma:
- Liturgia Ambrosiana o Milanesa
- Liturgia hispano visigoda o Mozárabe
- Liturgia Galicana,
- Céltica (irlando-británica)
- Liturgia Romana
- En Oriente (la Bizantina/la Siria).
Canto Mozárabe
a finales del siglo XI, el canto mozárabe supuso una de las manifestaciones culturales más apasionantes de la música medieval. Hunde sus raíces en los primeros tiempos de la cristianización y a su vez en la liturgia judaica. Lamentablemente no es posible su transcripción por su notación neumática que no expresa la altura exacta de los sonidos.
Del repertorio musical hispanovisigodo o mozárabe se conservan 45 códices, escritos fundamentalmente entre los siglos X y XI.
Música Profana
La música culta litúrgica es la única que ha quedado plasmada en los códices, lamentablemente la música medieval profana y popular, la que divertía y disfrutaba el pueblo prácticamente se ha perdido pues nunca se perpetuó por escrito.
Sabemos que en la Edad Media era habitual el canto y el baile entre la población, en muchos casos como herencia del mundo pagano.
A partir del siglo XII, surge el movimiento trovadoresco. Nacen los llamados trovadores, troveros y minnesänger. Son compositores y poetas que en ocasiones eran también cantores de su propia obra. En sus obras se emplean lenguas romances autóctonas: dialectos franceses, alemán, portugués, etc.
La música profana popular
Los juglares eran infatigables andariegos ambulantes que recorrían las villas y aldeas de la Europa medieval. Su profesión consistía en amenizar la vida de las gentes de la época a cambio de dinero, comida y otros bienes. No sólo se centraban en la música, sino que entretenían al público ejerciendo de saltimbanquis, lanzadores de cuchillos, equilibristas, domadores, etc.
Algunos de los instrumentos más utilizados en la Edad Media fueron:
Dulzaina: Se trata un instrumento de viento de madera de forma cónica y doble lengüeta.
Arpa: Es uno de los instrumentos más antiguos de la humanidad y que más aparece representado.
Salterio: una cítara pulsada, con un cuerpo que puede adoptar diferentes formas: trapezoidal, cuadrada, triangular o de hocico de cerdo.
Organistrum. Es un instrumento de gran tamaño de cuerda frotada. Se caracteriza porque las cuerdas están en el interior y son frotadas por una rueda de madera impregnada de resina accionada por una manivela del extremo opuesto al clavijero. Las cuerdas se seleccionan gracias a unas teclas o clavijas. Dado su tamaño, era necesaria la intervención de dos músicos, que lo sujetaban sobre sus piernas.
Rabel: Instrumento medieval cordófono de tres cuerdas, tocado con arco.